Suelo pasar el verano sin oír noticias ni ver la tele. Me desintoxico la mente y me entero de las cosas importantes por el boca a boca. Recuerdo que este año, cuando volví a mis costumbres, puse la radio en el desayuno, pero rápidamente la apagué porque se me indigestaba la tostada oyendo hablar de abrir tumbas del pasado.
Pero poco a poco fui reanudando mi dependencia a la información matutina, por supuesto eligiendo una fuente veraz, porque, ante tanta convulsión y sobresalto, por lo menos que te den las cosas claras.
De todas maneras en general, viendo como está la tv y otros medios, creo que tenemos información en exceso. Por la lucha por la audiencia convierten en espectáculo un suceso triste como un accidente. Parece que está de moda dar la información en directo con mucho aspaviento y por rellenar tiempo de programación improvisan con obviedades e inciden en el morbo. Cuando no caen en el amarillismo o abren las noticias con lo que es de páginas de sucesos.
Se supone que para eso están los medios de comunicación que son útiles y necesarios. Pero la información en exceso resulta inquietante. Hace que la capacidad crítica de la sociedad sea más baja porque las personas se van haciendo a todo, sube el umbral de sensibilidad, hace falta más para que nos asombremos y al final parece normal lo que no es normal.
Por otra parte las decisiones que tomamos dependen de lo que nos cuentan, y de cómo lo cuentan. Esto bien lo manejan algunos grupos utilizando la mentira abiertamente (que algo queda) y el despotismo de decidir para todo el mundo que es lo políticamente correcto, que es por supuesto nada más que su propia opinión y postura, anulando con el desprestigio y la descalificación cualquier otro punto de vista. Mediatizan la información que nos dan a través de medios de comunicación sesgados hacia sus intereses. Nos entretienen en los telediarios y periódicos con problemas de minorías o inexistentes que ocultan la realidad de la incapacidad del partido en el poder para resolver los problemas de la mayoría.
En el caso de la iniciativa sobre la memoria histórica es así. Pero alguno, que tiene que ver mucho con los hechos del pasado, ya se muestra contrario, por si la idea del que quiere ser famoso juez es como la carabina de Ambrosio, sale el tiro por la culata y le da a él.
Así es que cuando esté cocineando o vaya en el coche y tenga la tentación de conectar la radio pondré una emisora de música clásica o algún inocente programa de entretenimiento porque ya me he sobresaturado y no voy a esperar a que llegue junio.
Pero poco a poco fui reanudando mi dependencia a la información matutina, por supuesto eligiendo una fuente veraz, porque, ante tanta convulsión y sobresalto, por lo menos que te den las cosas claras.
De todas maneras en general, viendo como está la tv y otros medios, creo que tenemos información en exceso. Por la lucha por la audiencia convierten en espectáculo un suceso triste como un accidente. Parece que está de moda dar la información en directo con mucho aspaviento y por rellenar tiempo de programación improvisan con obviedades e inciden en el morbo. Cuando no caen en el amarillismo o abren las noticias con lo que es de páginas de sucesos.
Se supone que para eso están los medios de comunicación que son útiles y necesarios. Pero la información en exceso resulta inquietante. Hace que la capacidad crítica de la sociedad sea más baja porque las personas se van haciendo a todo, sube el umbral de sensibilidad, hace falta más para que nos asombremos y al final parece normal lo que no es normal.
Por otra parte las decisiones que tomamos dependen de lo que nos cuentan, y de cómo lo cuentan. Esto bien lo manejan algunos grupos utilizando la mentira abiertamente (que algo queda) y el despotismo de decidir para todo el mundo que es lo políticamente correcto, que es por supuesto nada más que su propia opinión y postura, anulando con el desprestigio y la descalificación cualquier otro punto de vista. Mediatizan la información que nos dan a través de medios de comunicación sesgados hacia sus intereses. Nos entretienen en los telediarios y periódicos con problemas de minorías o inexistentes que ocultan la realidad de la incapacidad del partido en el poder para resolver los problemas de la mayoría.
En el caso de la iniciativa sobre la memoria histórica es así. Pero alguno, que tiene que ver mucho con los hechos del pasado, ya se muestra contrario, por si la idea del que quiere ser famoso juez es como la carabina de Ambrosio, sale el tiro por la culata y le da a él.
Así es que cuando esté cocineando o vaya en el coche y tenga la tentación de conectar la radio pondré una emisora de música clásica o algún inocente programa de entretenimiento porque ya me he sobresaturado y no voy a esperar a que llegue junio.
09/11 - P.D.: No voy a dejar de informarme, lo que pretendo es que la actualidad no me enganche dejando de disfrutar otras cosas como música, etc… De cualquier manera me gusta poder elegir el medio de comunicación. Son las malas noticias lo que me sobresatura no el mensajero que yo haya podido seleccionar.
Y precisamente hoy he sabido que se ha “anulado otro punto de vista” en Cataluña (como decía más arriba), tal que si fuéramos dictadura bananera, retirando la licencia a la emisora que no está de acuerdo con el nacionalismo. Este es el tipo de despotismo al que me refería.
Y precisamente hoy he sabido que se ha “anulado otro punto de vista” en Cataluña (como decía más arriba), tal que si fuéramos dictadura bananera, retirando la licencia a la emisora que no está de acuerdo con el nacionalismo. Este es el tipo de despotismo al que me refería.
10 comentarios:
fran: ¿Te acuerdas cuando te confundía con Luisa?. Que gracia me ha hecho verla ahora.
Tienes razón en que el exceso de información hace que ya la gente no se asombre de nada y hasta una barbaridad les parezca normal.
Música clásica o buena música va a ser la solución.
Me encanta como escribes, quiero más, más...
Besitos
Gracias por venir y dejarme tu comentario. Estoy totalmente de acuerdo con lo que dices. Desde la primavera he dejado de oir mi emisora favorita por la mañana temprano, no me gusta el rumbo que lleva ese programa por su fanatismo ...así que he decidido leer los periódicos virtuales que me son afines y a veces los que no lo son por éso de la comparación y, en cuanto a la TV. sólo veo por la noche intereconomía incluida los sábados . Yo también prefiero la música clásica que sé que no me invita al desasosiego.Un saludo y volveré a leerte.Angela
Hace tiempo que dejé de ver la tele y solo veo en la digital los canales que m,e interesan y en la radio del coche oigo música.Los periodicos los leo, porque ahí selecciono yo lo que quiero leer.En cuanto a la memoria historica, en una época en que a los viejos se les manda a los asilos, no veo el interes en desenterrar muertos que ya nadie conoció.En fin.Descansen en paz. A ver si la siguiente generación es capaz de enterrar definitivamente ese horror. Un beso
No voy a dejar de informarme, lo que pretendo es que la actualidad no me enganche dejando de disfrutar otras cosas como música, etec… De cualquier manera me gusta poder elegir el medio de comunicación. Son las malas noticias lo que me sobresatura no el mensajero que yo haya podido seleccionar. La noticia que he oído hoy tiene que ver con esto por lo que voy a añadir una posdata en mi entrada.
Bueno Fran, me he acercado a conocerte y me encontrado con una entrada sincera y valiente, dado los tiempos que corren.
Me quedo con tres puntos con los que concuerdo, el primero: Llegar a aceptar como "normal",lo que no lo es, segundo: ocultar la realidad para que no se perciba la propia incapacidad como partido o como grupo de gobierno a la hora de resolver conflictos, y tercero: anular otros puntos de vista que no sean el que tienen que imperar socialemente, el único.
Esto nos está pasando y es verdaderamente triste, afortunadamente, tenemos ese recurso que yo tambien utilizo, salirme del circuito establecido de información de mass media, y cuando te sales ademas de libre te sientes con criterio para opinar libremente de los hechos según los sientes e interpretas.
Un abrazo y buena música, que siempre alivia.
Angela y Estrella, me alegro mucho de vuestra visita.
Es precioso el cuadro de la radio que has elegido ¿es tuyo? espero que la emisora que sintonizas sea igualmente relajante, aunque esto solo es posible sin tertulias políticas ni noticias, porque el mundo está que da pena.
El viernes fui al estreno de Bella ¿la has visto? Merece la pena, cada momento es un tesoro, y los actores magníficos.
Desde luego. Escuchamos noticias (el tiempo imprescindible en mi caso) para estar informados no para relajarnos.
Por otra parte, ese tiempo que utilizamos para informarnos debemos procurar no ser manipulados, engañados con noticias maquilladas, omisiones o incluso mentiras. Ese tipo de relajación no es la que buscamos. Para relajarnos la música.
Sí, fuimos a ver Bella. Y llevamos a dos de mis hijos y dos sobrinos. Les gustó mucho a todos.
It seems a little more than I need to check the information, because I was thinking: Why does not my GLOG these things!
You these things, I have read twice, for me, this is a relatively rare phenomenon!
fishing net
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