Con el paso del tiempo, días que nos parecieron normales los recordamos como días de felicidad.
Ahora soy consciente de pasar días de esos "normales" pero felices.
Será que los que ya vamos acumulando situaciones de todas, algunas bastante malas, al contraste reconocemos mejor como excepcional la tranquila vida en familia, cuando simplemente tenemos tiempo para disfrutar de estar juntos sin problemas.
Podemos hacer una larga lista de cosas sencillas que nos hacen disfrutar.
Para mí, una que me encanta de la lista es que mis hijos quieran que juegue a todo con ellos: a las cartas, a las palas, a luchar con las olas, a hacer barrearas para que no llegue el agua a la esterilla...Ya no están interesados en hacer castillos de arena, lo más parecido es una base militar, pero prefieren hacer un campo de fútbol, un concesionario de coches o un parque de bomberos, por ese orden.
Accedí a jugar con ellos al fútbol en la palya, me pusieron de portera, claro, la pelota venía poco y yo esperaba, pero cuando tuve oportunidad de hacer un regate parece ser que hice una elástica en el aire con caño incluido. Fui muy aclamada y hasta hubieran querido poder colgar el momento en youtube ¡resulta que sé jugar al futbol y no me había dado cuen!
Me gusta mucho Madid pero me agota. Cuando llega julio necesito salir de allí más que comer.
Me fui el 10 de julio y tenía que dejar demasiadas cosas ultimadas y hacer demasiado equipaje que incluía papeleo y carpetas pero no un ordenador portátil. Esta es la excusa para decir ¡siento no haberme despedido para más de dos meses! Ahora que puedo acceder un ratito a un ordenador, aprovecho para saludaros.
Ya solo me quedan tres paseos por la orilla del mar. Antes de volver a Madrid todavía tengo que pasar dos semanas en mi tierra de La Mancha y rematar la principal faena del año. Por lo que ahora me despido prácticamente hasta octubre.
Había conseguido vivir en "compartimento estanco" las vacaciones, pero ya hace algunos días aparecen fisuras y esto hace aguas. Las responsabilidades de septiembre están filtrándose en agosto.
Por cierto, para estar en la playa no pensaba que fuera en absoluto necesaria la música, y necesaria no es, bastan el sonido del mar y la brisa, pero he comprobado que un mp3 está muy bien y es muy agradable.
Hubiera insertado un video con música, pero desde este ordenador no se puede.
Hasta pronto!!!
12 comentarios:
Lindas vivencias, lindo post y lindo que hayas regresado al blog. Te esperamos durante el año, no te pierdas más.
Besos
Espero que hayas recargado pilas y me ha encantado ese descubrimiento futbolero, lo digo por si no funciona una cosa, siempre puedes dedicarte a otra:)
Que se te echa de menos, pero lo primero y más importante, que además es lo mejor, eso es lo que te deseo.
Un beso
Luisa
Disfruta todo lo que puedas. El mar es auténticamente renovador y carga de energías. Un beso grande.
Hola linda!, qué maravilloso Caí verdad?, yo no puedo vivir sin dejarme caer por allí de vez en cuando. Espero poder bajar en breve, que este verano aún no he podido. He visto tu postal en mi blogroll y he venido corriendo a verla. Es la Barrosa no?
Un beso. Disfruta del tiempo que te quede.
jajaajjaj ha sido muy gracioso lo del fútbol, todos los días se descubren nuevas habilidades (bueno todos no, pero sí de vez en cuando)
Las playas de Cádiz son geniales, a mí me encantan sobre todo por las olas.
Lo mejor que hay para la playa es llevar un mp3 sin duda, para mí mejor que un libro la verdad.
Me alegro que lo hayas pasado tan bien. Besos
Que bien Fran, disfrutalo a tope. Yo ahora añoro esos veraneos que hacía antes. Estar en Cadiz es un lujo.
Te he echado de menos , pero me alegro mucho de que tengas unas vacaciones tan estupendas.
Hasta la vuelta. Un beso
Fuerza para el regreso. ¡Desde luego, tú si que sabes adonde acudir para recargar pilas! Yo este año no he podido salir por causas familiares, pero estoy contenta porque todo parece volver a su cauce. Un saludo y hasta pronto.
Me alegra mucho que la playa de mi tierra, te ayude a desconectar y a disfrutar de tu familia. Me encanta esa imagen, desde la playa de ¿Cortadura?. Un beso para la vuelta.
Que tu regreso a la gran ciudad sea lo más apacible posible...
La sencillez de las cosas que relatás es la que nos dá la felicidad de estar vivos!!!!!!
Un beso!!!
Esos recuerdos acumulados los vas a recordar para siempre. los chicos crecen y sus necesidades de juego se van cambiando es normal... Espero que la Mancha te deje ver esos atardeceres tan hermosos que en setiembre son expectaculares por lo menos a mi me lo ha parecido...Aquí, en el norte son distintos.... Disfruta el resto de estos días que te quedan para volver con ilusiones renovadas. Un abrazo Angela
Cómo me alegran tus noticias tan optimistas Fran. A mi también me encantaba que mis hijos me buscaran para jugar, aunque nunca al futbol, cuando estaban en edad de jugar.
Ya nació mi precioso nieto, le he tenido 22 días conmigo y hoy se acaban de marchar, precisamente a Cádiz (Puerto de Santamaría, donde viven)
Estoy con una morriña que no se puede aguantar...
Me ha tenido muy ocupada, pero feliz.
El martes me voy a San Juán una semana, antes de que operen a Julio, para que disfrute del mar.
Un beso, preciosa, te eché mucho de menos.
Me ha encantado encontrar vuestros comentarios, gracias.
Alemamá, veo que llega la primavera a tu blog y está espléndido.
El de Luisa también está genial con su nuevo look.
Alodia, estamos de acuerdo: nada como el mar para recargar pilas.
Guerrera ha acertado con la playa y espero que haya podido llegar hasta allí.
Aprendiz, ¡qué sorpresa para mí cuando descubro una nueva habilidad! (aunque tengo que reconocer después de pasado el jolgorio que eso fue una carambola del destino).
Qué bien que para Eligelavida todo vuelva a su cauce en la familia, eso es lo principal.
Mª Jesús, siempre me alegra ver tu smile rodeado de pequeños. Sé que tú disfrutas siempre con tus hijos a todas las edades, eres un referente para mí. Ya veo que estás que voy que vengo con tus ocupaciones. Espero que todo te vaya bien.
Alegría ¡ ya puedes estar orgullosa de tu tierra ¡
Lauri, mi regreso a la ciudad es un shock aunque por lo menos me encuentro pletórica y con fuerzas.
Ángela ¡Cómo lo sabes! ¡Los atardeceres manchegos son preciosos! Precisamente muchas veces vamos al campo a esa hora, cuando ya no hace calor, y nos sentamos a contemplar cómo se mete el sol en el horizonte, igual que hacíamos en la playa. Después nos quedamos hasta que salen las estrellas, que también es un lujo indagar por el firmamento sin luces que estorben.
Militos, como ya he pasado por tu blog, he visto la foto de tu nieto que es precioso. Me imagino lo que habréis disfrutado con él y lo difícil que habrá sido separarse por un tiempo. Aunque nada mejor para curar esa morriña que ir a San Juan con tu Boina Verde. Espero que todo vaya muy bien a la vuelta.
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